Los hinchas de los New York Jets tienen dos maneras de mirar la temporada 2012. Una negativa, ya que además de quedar fuera de los playoffs por segundo año consecutivo, estar en el medio de la polémica por contratar a Tim Tebow y tener un equipo menos que mediocre, se suman a todos esos antecedentes una serie de jugadas que averguenzan a cualquiera que use el uniforme albiverde, casi todas ellas protagonizadas por el mariscal Mark Sanchez. ¿La forma positiva de ver este fracaso? Que difícilmente los Jets vuelvan a repetir una campaña como esta.

Y ya hay signos de cambio: luego de lanzar cuatro intercepciones y perder el balón en los segundos finales del partido (a metros de la zona de anotación rival) en la derrota de 14-10 ante los Titans, el entrenador de los Jets, Rex Ryan, anunció que para el duelo del próximo domingo contra los Chargers, el mariscal titular no será Sanchez… Pero tampoco el mediático Tim Tebow. La responsabilidad recaerá en Greg McElroy, quien hace dos semanas ingresó ante los Cardinals en el tramo final del partido para rescatar la victoria.

La decisión de Ryan y los Jets deja dos importantes conclusiones.

La principal es que el equipo seguramente buscará un nuevo mariscal titular para la próxima temporada, pese a que a Sánchez le quedan US$ 8 millones y un año más de contrato. Según las estadísticas oficiales de la NFL, Sanchez es uno de los peores mariscales de la liga, sumado a eso actuaciones tragicómicas como ante los Patriots y los Titans. El mensaje de Ryan es claro: se le acabó la paciencia y no va a seguir defendiendo lo indefendible, tomando en cuenta, además, que la ineptitud de Sánchez también le puede costar el puesto.

La otra conclusión es en realidad una pregunta que crece con cada partido de los Jets: ¿por qué contrataron a Tim Tebow? Si era por vender camisetas, la deberían haber dado más opciones como mariscal, sobre todo como ha jugado Sanchez. Si era para ejecutar el wildcat (la jugada en que el mariscal puede correr, pasar o recibir), les faltaron muchas horas de práctica para considerarla una alternativa viable para la ofensiva.

El experimento Sánchez-Tebow ya es historia. Todo indica que el próximo año ambos mariscales deberán buscar nuevo empleador, pero luego de lo que mostraron en 2012, ninguno está para exigir ser el mariscal titular de ningún equipo de la NFL.

Por lo menos para los hinchas de los Jets, ya sea en una temporada de transición con McElroy como mariscal titular o con la contratación de una mega estrella, lo más probable es que el 2013 sea mucho mejor que el 2012.