El conflicto social originado en Ferguson, Missouri, luego que no se decretaran cargos criminales en contra del policía que mató con unos siete disparos a un joven afroamericano de 18 años que estaba desarmado, llegó hasta la NFL a través de la protesta de cinco jugadores de los Saint Louis Rams.
El domingo 30 de noviembre, en el duelo en casa ante los Raiders, los futbolistas Stedman Bailey, Chris Givens, Tavon Austin, Kenny Britt y Jared Cook salieron a la cancha del Edward Jones Dome con el gesto “manos arriba, no dispare” que ha sido el símbolo de las protestas contra la brutalidad policial en todo Estados Unidos. VER VIDEO
La acción de los jugadores de los “Carneros” generó una gran polémica en el país del norte, especialmente en Saint Louis, ubicada en el estado de Missouri, y del cual Ferguson es uno de sus suburbios. Por ejemplo, un bar de la ciudad anunció que dejaba de apoyar a los Rams, que no tendría “happy hour” a la hora de los partidos y que quitaría todas las fotos del equipo colgadas en la pared.
A su vez, la asociación de policías de Saint Louis (una organización gremial), dijo estar muy decepcionada de los jugadores de los Rams, “que ignoraron cerros de evidencia” y calificó la acción de protesta como “falta de gusto, ofensiva e incendiaria”. Además, exigieron una sanción para los futbolistas. La NFL y la organización de los “Carneros” desecharon cualquier castigo.