El año pasado en la fecha 12, el equipo de Washington tenía un récord de 4 victorias y 7 derrotas, y al final del campeonato igual consiguió un lugar en los playoffs como campeón de la División Norte de la NFC. Esta temporada, el registro del equipo granate es 5-6 en la semana 12 y luego de la victoria sobre los Seahawks el lunes por la noche, por ahora ocupa el último puesto que clasificaría a la postemporada con un wild-card.
En 2020, muy pocos apostaban por Washington como uno de los clasificados a los playoffs. Este año había más esperanza, pero una serie de lesiones y una racha de negativa de cuatro derrotas parecía descarrilar cualquier opción realista.
Sin embargo, nunca se puede descartar a este equipo bajo la conducción del coach Ron Rivera y el que además en la cancha tiene a incansables luchadores como el QB Taylor Heinicke.
Rivera instaló con éxito en el camarín la filosofía del “next man up”: es decir, si cae un jugador lesionado, no hay tiempo para lamentarse y un compañero debe ocupar el puesto de la mejor manera posible. Así ocurrió con el desconocido Heinicke cuando el año pasado reemplazó a Alex Smith y también al comenzar esta temporada cuando saltó desde la banca para ocupar el puesto del lesionado Ryan Fitzpatrick. Así ha ocurrido con la defensa que intenta arreglárselas sin Chase Young, así ha ocurrido con la parchada línea ofensiva y también con los dos novatos tight end, John Bates y Sammis Reyes.
El titular Logan Thomas se lesionó en la Semana 4 y el reemplazante, Ricky Seals-Jones, se lastimó en la Fecha 10 nada menos que contra los campeones Buccaneers. “Next men up”: Bates y Reyes cumplieron como reemplazantes, cada uno en su rol, en especial para el larguísimo último drive que selló la sorpresiva victoria de Washington sobre Tampa Bay. La fecha siguiente, con solo Bates y Reyes en la formación, los granates vencieron a los Panthers como visitas.
Para el partide en Monday Night Football contra los Seahawks volvió Thomas a la titularidad y eso mermó la participación del chileno Reyes, pero igual estuvo en 18 snaps de cuadros especiales y en 3 de la ofensiva (aunque dos de ellos fueron jugadas en las que el QB se arrodilló). Fueron 21 jugadas en total que consolidad el crecimiento del jugador nacional. Al Washington Football Team le quedan seis fechas para terminar regular y en cinco de esos partidos jugará contra rivales directos de la División Este de la NFC (dos veces contra los Eagles, dos contra los Cowboys y un duelo frente a los Giants). Con cuatro triunfos más aseguraría se presencia en los playoffs y el éxito de la filosofía impuesta en el camarín por el coach Rivera.
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