Fue el 15 de enero de 1967. Han pasado 50 años desde esa histórica fecha. Muchas cosas han cambiado en el mundo; el cambio ha sido más drástico en la NFL. Aquel día se jugó el “Primer Campeonato Mundial” del fútbol americano, que con el tiempo sería bautizado como Super Bowl, y se convertiría en la base sobre la cual se construiría un gigantesco y millonario imperio.

Pero volvamos a enero de 1967, cuando las cosas eran más simples. O incluso más atrás.

En 1960 asomó la American Football League y se convirtió en un duro rival de la ya consolidada NFL. Aparecieron equipos en lugares como New England, Buffalo, Miami, Cincinnati, Denver y Dallas. Cada liga tenía su propio draft y se peleaban los mejores jugadores del fúbol americano universitario.

La paz se firmó en junio de 1966 y como tregua, ambas ligas decidieron que sus campeones se enfrentaran en un partido único. Le llamaron “AFL-NFL World Championship Game”. Era el primer paso a la fusión que se concretaría años más tarde.

Los Green Bay Packers de Vince Lombardi fueron los campeones de la NFL. Los Kansas City Chiefs eran los monarcas de la AFL. El duelo fue programado para enero del año siguiente y recién en diciembre ambas ligas decidieron que se jugaría en el Coliseo de Los Angeles.

El recinto tenía una capacidad para 93 mil espectadores, pero apenas llegaron unos 61 mil hinchas a ver este encuentro, pese a que la entrada costaba solo 12 dólares. Todo un ejemplo de que en esos años, eran más populares el béisbol y el fútbol americano universitario.

El partido fue transmitido por dos canales: CBS y NBC, ya que cada una de las empresas tenía contratos con las ligas en cuestión, y pagaron en total US$ 2 millones por el evento. A cambio cobraron entre US$ 70 mil y US$ 80 mil por los 30 segundos comerciales.

En el entretiempo no hubo algo que se pudiera calificar de “show”: los hinchas que no estaban en el baño o no fueron a comprar una hamburguesa, se entretuvieron escuchando al trompetista Al Hirt, y a las bandas de la Universidad de Arizona y del Grambling College.

Tan poca importancia tuvo este primer Super Bowl que ambos canales borraron el partido de sus archivos. La NFL dedicó un equipo especial a buscar todo el material de archivo disponible y así ensamblar el partido para poder retransmitirlo completo recién en enero de 2016. Ahora está disponible con el Game Pass de NFL.com.

Cincuenta años después, cada final Super Bowl se repleta, conseguir un ticket en la reventa supera los US$ 2 mil, los 30 segundos de publicidad cuestan $ 5,5 millones de dólares, los artistas se pelean por aparecer en el show del medio tiempo y la NFL es la liga deportiva más potente a nivel mundial.