La dinastía moderna de Alabama está a 60 minutos de darle a Nick Saban su sexto título nacional (cinco con los “Crimson Tide” y uno con LSU) y así igualar nada menos que a Bear Bryant (todos sus logros con “Bama”) como el entrenador más ganador en la historia del fútbol americano universitario.
Alabama no disputó la final de la Conferencia SEC luego de perder el partido final de la temporada regular ante Auburn, pero igual fue seleccionado por el Comité Nacional que elige a los cuatros equipos que disputarán el título nacional cada temporada.

Nick Saban (a la izquierda) celebra el triunfo sobre Clemson junto a su mariscal titular, Jalen Hurts.
Para borrar cualquier duda, en una de las semifinales disputada en el Sugar Bowl, los “Crimson Tide” derrotaron sin apelación por 24-6 a Clemson, campeón nacional el 2016 y hasta dicho encuentro, el número uno en el ránking nacional.
Como es habitual en cualquier equipo de Saban, la defensa es su fuerte y ahí destacan el profundo Minkah Fitzpatrick y el apoyador Mack Wilson.
La final se disputará el lunes 8 de enero en el nuevo Mercedes Benz Stadium de Atlanta y el rival será Georgia, campeones de la Conferencia SEC el 2017, que en el Rose Bowl vencieron de manera dramática a Oklahoma por 54-48 tras empatar en el último minuto y luego ir a dos tiempos extra.
Aunque los “Bulldogs” de Georgia tienen dos grandes jugadores ofensivos en los corredores Sony Michel y Nick Chubb, y además jugará prácticamente de local en Atlanta, el favoritismo del duelo es para Alabama: tienen más experiencia en grandes partidos y, por sobre todo, su entrenador es Nick Saban.