La temporada pasada logró el reconocimiento que hace rato buscaba, al liderar a su equipo hasta la final de la Conferencia Nacional. Se quedó un partido corto de llegar al Super Bowl. Pero este año Alex Smith retomó los controles de los 49ers con un solo objetivo: jugar el 3 de febrero en el Superdome de Nueva Orleans. Y en rigor, lo hará, pero como un reserva con pocas probabilidades de que sume algún minuto en cancha. ¿Qué pasó desde entonces hasta acá? Iba todo bien, pero el 11 de noviembre se lesionó y nunca más volvió a la titularidad, que quedó en manos del explosivo y sorprendente Colin Kaepernick.
La triste realidad de Smith se vivió en las sesiones con la prensa durante la semana previa al Super Bowl XLVII: relegado a una mesa, en un rincón, mientras Kaepernick y otras figuras ocupan un podio para hablar con los periodistas.
Es por eso que lo más probable es que no siga en los 49ers para la temporada 2013. Y por los números que ha tenido Smith en la última temporada y media, sería un agente libre más que apetecible para varios equipos que urgen de un mariscal decente. Uno de sus destinos más probable son los Kansas City Chiefs, que intentan realizar un cambio radical de la mano del recién contratado entrenador Andy Reid.