La frase es de Adam Schefter (@AdamSchefter), especialista de la NFL para ESPN y uno de los periodistas deportivos con más seguidores en Twitter a nivel mundial, más de 2 millones: «A comienzo de los 90, no eran más de 12 los periodistas que cubrían el Scouting Combine. Este año, la NFL entregó 800 credenciales». El dato refleja la importancia que ha tomado este evento dentro del fútbol americano profesional, que marca en la práctica, el comienzo de las actividades de la temporada 2013 (aunque oficialmente, esta empieza el 12 de marzo, a las 16 horas).
El evento consiste en cuatro días de ejercicios de los 300 mejores jugadores del fútbol americano universitario que decidieron entrar al Draft de la NFL (la liga pone como exigencia que hayan transcurrido al menos tres años desde que se graduaron de la secundaria). Se realiza desde 1987 en el estadio de los Indianapolis Colts y asisten todos los entrenadores, asistentes y gerentes de los equipos profesionales para ver en terreno a los candidatos.
Los postulantes se someten a un grupo de pruebas generales, como de velocidad en 40 yardas, levantamiento de pesas, medición de salto en altura, salto largo desde una posición fija y ejercicios de rapidez y habilidad entre conos. Además, hay pruebas especiales por posición, divididas entre mariscales, corredores, receptores, línea ofensiva, línea defensiva, apoyadores (linebackers) y secundaria (esquineros y profundos). A todo eso se puede sumar una corta entrevista sicológica si así es requerida por algún equipo.
Desde hace unos años existen también una serie de estos entrenamientos combinados a nivel regional, al que pueden postular otros jugadores de fútbol americano universitario que no fueron invitados al evento principal u otros deportistas que quieren intentar ingresar a la NFL, como es el caso de la pateadora Lauren Silberman, quién jugó fútbol (soccer) en la Universidade de Wisconsin.
Para el Scouting Combine de 2013, los principales prospectos son el mariscal Geno Smith (West Virginia), el tacle ofensivo Luke Joeckel (Texas A&M), el apoyador Jarvis Jones (Georgia), el esquinero Dee Milliner (Alabama), el guardia Chance Warmack (Alabama) y, por cierto, el apoyador Manti Te’o (Notre Dame), quien será profundamente analizado en las entrevistas luego del escándalo de su novia que supuestamente había muerto, pero que en rigor nunca existió.
La evaluación que hacen los entrenadores y gerentes en el NFL Combine, más el análisis de todos los partidos disputados en el fútbol americano universitario, terminan por definir qué jugadores los equipos quieren para el Draft.